Ratificamos nuestra postura de cero tolerancia y condenamos todo tipo de violencia en contra de las mujeres, niños, niñas, adolescentes y la vulneración de sus derechos, en cualquier circunstancia en que se den, ya sean espacios políticos, organizativos o en la sociedad en general, ningún hecho, comprobado, de esta naturaleza puede quedar en la impunidad.
Sobre los hechos que se investigan del asambleísta del Movimiento Pachakutik Peter Calo, esperamos una adecuada actuación de la Fiscalía General del Estado, el respeto al debido proceso y la presunción de inocencia, hay sucesos que llaman la atención alrededor de este caso que solo una investigación imparcial determinará la verdad, para que no sea utilizado con fines políticos en medio de una coyuntura nacional compleja.
Mientras avance la investigación la compañera Pilar Llanos, asambleísta alterna, debe principalizarse de manera inmediata en la Asamblea Nacional. Ratificamos así nuestro compromiso de continuar en la lucha, aunque los escenarios sean adversos, para enfrentar la actual coyuntura política.
Al Movimiento Pachakutik hacemos el llamado para actuar con la misma celeridad y contundencia en este y todos los casos, dentro de la bancada en la Asamblea Nacional, así como en el Comité Ejecutivo y la Coordinación Nacional, como son: del asambleísta Rafael Lucero, por violencia intrafamiliar; de Cecilia Velasque, actual Subcoordinadora, por los audios filtrados que revelan pretensiones de negociar con el gobierno; de Jorge Herrera, candidato a coordinador nacional, por usar a Pachakutik para poner a familiares en cargos públicos, y reiteramos el pedido sobre Ricardo Vanegas, Gisela Molina por pisotear los principios políticos ideológicos del MUPP, entre otros.
El control disciplinario y los pedidos de destitución, desde el Movimiento y la Bancada, no tienen por qué ser selectivos, la violencia debe ser rechazada en todas sus formas, en igual sentido que los hechos de corrupción, la falta de principios y transparencia.
Esperaremos el desarrollo de las investigaciones, tanto de la Fiscalía, como del Tribunal de Ética y Disciplina del MUPP, para tomar decisiones contundentes con nuestra estructura organizativa, apegados nuestro derecho propio.
Pedimos a todos los compañeros y compañeras responsabilizarnos de cada acto individual, ya que estos nos afectan positiva o negativamente a todos, la mejor forma de continuar construyendo nuestro proyecto político – organizativo es caminando juntos, respetando los derechos, obligaciones y decisiones colectivas; porque son nuestros mecanismos de control disciplinario, ético y moral de manera comunitaria, como principios de vida que fueron construidos por nuestros abuelos y abuelas.
